Flores de jardín.

Desde hace un tiempo las florecillas silvestres invaden los vestidos. Es un estampado  que personalmente me parece que sienta muy bien y alegran los tonos otoñales.

La tienda que ha decidido montar un invernadero es Pull&Bear, que nos dan un montón de variedad y a buen precio. 

 

Zara también se apunta a la moda de las flores diminutas tipo vintage, pero en su versión juvenil Trafaluc. Me han encantado los dos de las estrellas, para el tiempo frio quizá sea más ponible el de la fila inferior, aunque ambos como veis son preciosos y asequibles.

 

Mango se vincula al cachemir que nuestras madres y abuelas tanto conocen, a pesar de que los diseñadores lo llamen estampado paisley, no os volváis locas porque es como el de toda la vida. Ya sabemos que el retro está de moda y esta prenda es un gran ejemplo. Cualquiera de los dos modelos seleccionados me los pondría con los ojos cerrados.

Los últimos pertenecen a dos marcas, Stradivarius propone uno largo ideal para una chica alta, puesto que nosotras podríamos hacernos dos vestidos al precio de uno, como en el Carrefour pero con algo de maña en la costura. La segunda es Topshop una cadena de almacenes de ropa del Reino Unido, que en esta ocasión con la gasa a precio de oro nos han desencantado.

 

¿Tenéis vosotras este tipo de vestidos? ¿Os gusta este aire boho-chic?